Entrevista a Anabel Lee
El cuarteto Anabel Lee, formado por Víctor (voz), Perdi (bajo), Jordi (batería) y Aitor (guitarra) no dan tregua y en este recién estrenado 2023 estarán presentando los temas de su álbum debut por toda la geografía nacional y en muchas de esas salas con el ciclo GPS en su 13 edición. Un sonido propio y fuera de etiquetas que hacen de sus directos un explosión de energía.
1.- Antes de nada, ¿podéis hablarme del entorno musical familiar? ¿Eran hogares donde se escuchaba o tocaba música a menudo?
Perdi: Desde antes de nacer ya estaba rodeado de música; mi madre escuchaba a The Cure mientras estaba embarazada y tengo un padre guitarrista (Sergio, de Código Neurótico). Siempre nací rodeado de instrumentos, aunque hasta muy tarde no les presté atención, lo que más me interesaban eran las batallitas de giras, conciertos y aventuras de los 80s.
Víctor: En mi caso eran unos melómanos de cuidado, y como músico he crecido desde el otro lugar: el del espectador que consume y vive la música desde la admiración y el respeto. Recuerdo los vinilos de Demis Roussos y Camarón de mi padre, o cogerle a mi hermana mayor casetes de El último de la fila o The Cure, y mi madre flipar con mis gustos siendo tan niño.
2.- ¿Qué discos os animaron a dedicaros a la música?
Víctor: “Un día en el mundo” de Vetusta Morla. Me cambió la vida, sin buscarlo. Aprendí a cantar con ese disco, poniéndomelo una y otra vez en casa, cantando por encima y grabándome. Quizás fue la primera vez que me plantee que una voz también podía ser un instrumento y una herramienta para expresar lo que llevas dentro. Y en cuanto a los Vetusta, recuerdo sentirme una persona súper privilegiada por escucharles, y descubrí que existía algo que se le decía «música indie»… imagínate el resto.
Perdi: Un montón de discos, pero creo que los que más me pusieron las pilas fueron …”And Out Come The Wolves” de Rancid y el “London Calling” de The Clash, debía sacarme todas las líneas de bajo posibles de esas bandas, con ello me motivé para hacer música propia.
3.- De todo ese bagaje, ¿Qué os habéis llevado a vuestras canciones?
Víctor: El respeto por la música y por todos sus profesionales, desde el que se sube al escenario al que está en la produ. Y el vínculo con el público, sin el cual nada tiene sentido. Por eso nuestros directos son tan crudos, queremos que la gente se vaya a casa sintiendo que nos hemos matado en el escenario por y para ellos, y que no han visto un concierto más. Somos afortunados de subirnos a un escenario para 10 o 1000 personas, nos da absolutamente igual, y esa es la banda que a nosotros nos gustaría ver.
Perdi: El haber vivido rodeado de la cultura Punk Vallesana ha hecho que nuestras composiciones partan desde puntos de vista muy distintos a otras bandas, a nivel de actitud, de cómo afrontar y de cómo comportarse con la gente que trabaja en el mundo de la música.
4.- ¿Qué es lo que os mueve a la hora de crear vuestra música? ¿Qué otras cosas os inspiran a la hora de componer?
Perdi: A mí los sentimientos, lo que me mueve es poder expresar lo que siento en ese momento que compongo.
Víctor: Exacto, y en mi caso, de manera más inconsciente que consciente. Aitor, nuestro guitarrista, bromea con que las canciones son mi cubo de basura emocional.
5.- Desde vuestro punto de vista, ¿es más fácil hacer canciones tristes buenas que canciones luminosas buenas?
Víctor: Sí, por lo que sea es más fácil, y en Anabel Lee hay mucha melancolía. Pero siempre desde la esperanza, y creo que en nuestras canciones también se puede ver esa búsqueda de la luz.
Perdi: A mí al menos siempre me salen mejor las cadencias tristes o las “tristefeliz”, pero depende mucho del mood vital del momento o de lo que escuches esa temporada previa a componer, pero siempre sale algún tema feliz bueno.
6.- Casi dos años después de la publicación de vuestro debut, ¿Cómo lo veis y cómo os veis respecto a ese momento? ¿Qué aspectos han mejorado? ¿Cuáles han empeorado?
Perdi: Han sido unos años duros y lo que nos queda. Estrenamos el primer disco en época Covid y rápidamente sacamos un segundo EP que pasó un poco desapercibido, casi pareciendo un bonus del primer disco. Hemos mejorado muchísimo a nivel musical, cosa que se ve reflejado en los últimos lanzamientos y en el disco que se viene. La estructura de la banda también cambió en el transcurso de estos años y ahora se puede decir que estamos en un muy buen momento a nivel mental y muy a gusto con los compañeros.
7.- Tras una época tan loca como la que hemos vivido y que parece que ya estamos dejando atrás, ¿Cómo afronta el futuro una banda como la vuestra, ¿Qué expectativas, miedos o esperanzas tenéis al respecto?
Perdi: Se viene un año bastante loco, realmente lo que todos los de la banda habíamos deseado siempre, tocar, tocar y tocar. Componemos la canciones pensadas para ser tocadas delante de la gente y allí es donde brillan más, tanto ellas como nosotros, que nos dejamos las rodillas, las manos y la voz en cada directo.
Víctor: Si no somos felices en la música ahora, ¿Cuándo lo vamos a ser? De esta máxima sale nuestro compromiso para sacar el mejor disco y hacer los mejores conciertos de nuestras vidas, y el compromiso es total. Y con algo de suerte algún día podremos dedicarnos solo a esto.
Redacción: Juan A. Ruiz-Valdepeñas