7 increíbles descubrimientos relacionados con el sonido y la música
Los sonidos rodean al ser humano todo el tiempo. La música es la forma más elevada de arte. También hay una serie de estudios interesantes cuyos resultados parecen inimaginables a primera vista. He aquí 7 interesantes descubrimientos científicos sobre el sonido.
Las ondas sonoras permiten analizar la sangre
Se trata de un método innovador que presenta importantes ventajas sobre los métodos tradicionales. Es mucho más rápido y preciso, además de seguro. Las ondas sonoras de diferentes frecuencias pueden separar las células sin dañarlas físicamente ni atacarlas con sustancias adicionales. Lo mejor de todo es que no se necesita un laboratorio especializado para un «buen análisis de sangre». Todo lo que necesita es un dispositivo pequeño y portátil que puede llevar fácilmente a los lugares más difíciles de alcanzar.
Por cierto, apuestas deportivas casas también ofrecen hacer bajo un cierto fondo musical. Esto ayuda a mantener la concentración y hacer un análisis competente del evento deportivo elegido.
La levitación puede llegar a ser posible
Y esto es gracias a las ondas sonoras. En 2014, científicos escoceses descubrieron que es probable que las ondas sonoras adecuadas sean capaces de vencer la gravedad y levantar un objeto. Los escoceses abandonaron su trabajo, pero los datos que tenían fueron retomados por otro equipo que, unos años más tarde, logró construir un dispositivo que funcionaba y elevaba pelotas de poliestireno en el aire utilizando solo una secuencia de ondas sonoras.
Música contra fuego
Cuando dos estudiantes de la Universidad George Mason de Virginia dijeron que querían apagar incendios con sonido, poca gente los tomó en serio. Al contrario, la mayoría pensaba que era imposible. Así que los estudiantes hicieron lo que suelen hacer los estudiantes ambiciosos: demostraron que un alumno puede superar a un profesor. Utilizando ondas sonoras de baja frecuencia (de 30 a 60 Hz), consiguieron aislar las llamas del oxígeno y extinguir el fuego casi de inmediato. La extinción por ondas sonoras es un método que sin duda se desarrollará y utilizará allí donde sea necesario evitar daños adicionales. Por ejemplo, en bibliotecas o edificios históricos.
Música y buena mesa
En este caso, no está del todo claro cómo explicar el fenómeno. No obstante, se ha observado repetidamente que determinados sonidos influyen en la percepción de los sabores. Los tonos de baja frecuencia aumentan la percepción del sabor amargo, los tonos de alta frecuencia acentúan el dulce. El ruido, independientemente del tono, tiene un efecto negativo en la sensación de comer. La ciencia ya sabe que no se trata del efecto de las ondas sonoras en las papilas gustativas, sino del efecto de los sonidos en determinadas partes del cerebro. Sin embargo, los detalles siguen siendo un misterio.
Música y psicología
La música puede no gustar como género concreto o en general. Es cuestión de gustos. Sin embargo, hay personas que no pueden tolerar los sonidos en absoluto. Suelen ser sonidos específicos, como los ronquidos o las bofetadas. Cuando se expone a un estímulo concreto, la persona que padece misofonía reacciona con miedo, ira e incluso agresividad. La enfermedad es grave, no existe ningún método de tratamiento y, lo que es peor, la misofonía suele ser más fuerte en las relaciones con los familiares más cercanos del paciente.
Ondas sonoras y anestesia
Si no fuera por los distintos tipos de anestesia, casi todos los procedimientos médicos irían acompañados de un dolor inolvidable para el resto de la vida. Mientras tanto, un fármaco adecuadamente seleccionado basta para dormir al paciente y privarle de sus sentidos.
¿Cómo funciona? Esto es interesante porque, aunque la anestesia se utiliza a diario desde hace muchos años, los propios científicos no pueden explicarla del todo. No se sabe exactamente qué provoca la «desconexión» de los sentidos. Una nueva teoría sugiere que los nervios del cuerpo humano transmiten ondas sonoras en lugar de impulsos eléctricos. Pero sigue siendo un misterio si es así. No obstante, la «teoría del sonido» arroja nueva luz sobre los problemas de la anestesia.
¿Se puede ver el sonido?
Hasta ahora parecía imposible, pero experimentos recientes demuestran que sí. El experimento era relativamente sencillo. Se entrenó a monos para que respondieran a la luz, y funcionó bien cuando la luz era muy brillante. Sin embargo, cuando la luz se atenuaba, la capacidad de los monos disminuía drásticamente. Entonces se introdujo un estímulo sonoro adicional y la situación volvió a ser la original, lo que dio que pensar a los científicos. Basándose en este experimento, principalmente en tiempos de reacción muy cortos, llegaron a la conclusión de que los sentidos de la vista y el oído están mucho más conectados de lo que se pensaba.